Escribo este artículo tras una más que un interesante debate entre varios moteros sobre si es seguro reparar pinchazo en una moto.
La respuesta es sí. Aunque claro, como todo tiene sus matices.
Es curioso observar como la reparación de los pinchazos de la moto puede generar pensamientos de inseguridad al respecto.
Creo que estamos en una sociedad de consumo sin miramiento alguno, pues el del todo erróneo pensar que una rueda donde hemos sufrido un pinchazo deja de ser segura si la reparamos en lugar de cambiarla, cuando esto no es así.
Una reparación correcta de un neumático de moto resultará en una experiencia de conducción exacta a la que hemos tenido antes de sufrir el pinchazo.
Obviamente existen diferentes tipos de pinchazos, los hay por la introducción involuntaria de objetos en el neumático y los producidos por desgarro o rajas en la cubierta.
El más habitual es el primero, cuando un objeto se introduce y se queda en la superficie del neumático de moto, generalmente producido por un elemento afilado suelto en el asfalto, como suele ser la presencia de tornillos, clavos y otros elementos punzantes.
Reparar el pinchazo producido por un tornillo o clavo en la cubierta de una moto es algo relativamente sencillo y que podemos hacer todos.
Además aprender a realizar este tipo de reparaciones no sólo sirve para la moto, si no que también serían aplicables a otros vehículos, como reparar un pinchazo en el coche.
Los kits de reparación de pinchazos de moto
Para empezar, seguro que si eres motero alguna vez has tenido un kit de reparación de pinchazos entre las manos o directamente es un elemento obligado de tu equipación motera.
Aunque esto es una afirmación que se puede quedar a medias ya que por ejemplo aquellos que utilizan la moto en ciudad, sobre todos si esta es una scooter, rara vez habrán tenido que utilizar un kit de reparación de pinchazos.
Estos kits incluyen diferentes elementos que sirven para poder reparar casi cualquier pinchazo en una moto sin tener que depender de la grúa y un profesional del neumático.
Por este motivo se muestran tremendamente útiles para aquellos que hacen rutas de fines de semana o viajan con la moto.
Estos kits están compuestos de diferentes elementos, los cuales pueden diferir, si bien lo común es lo siguientes:
- Una especie de broca berbiquí
- Una especie de aguja de gran tamaño
- Unas mechas o tiras de caucho
- Una cola especial
- Una pequeña herramienta de corte
Hasta aquí son los elementos comunes, los mismos pueden diferir en tamaño, número de mechas, etc.
Lo que puede cambiar entre kits es la presencia de un sistema de inflado del neumático. Los kits más económicos no lo incluyen y será el propio conductor de la moto el que recurra a uno u otro sistema de inflado
Sobre los tipos más comunes de sistemas de inflado de ruedas para la reparación de pinchazos tendremos las cápsulas metálicas de aire comprimido y los compresores eléctricos.
Sistemas de inflado para pinchazos
Los sistemas de inflado son imprescindibles para poder reparar el pinchazo por uno mismo, esto es debido a dos motivos principalmente, el primero y más lógico es que tras pinchar la rueda siempre se pierde aire, puede perderse un poco o de forma total, todo dependerá del tipo de pinchazo, la carga que soporte la moto tras el pinchazo así como el tiempo que transcurra entre el pinchazo y la reparación.
El segundo motivo es que durante el proceso de reparación del neumático, donde deberemos extraer, si está presente, el elemento que nos ha hecho pinchar, perderemos casi todo el aire que contiene la moto ya que estaremos trabajando sobre ella entre 20 y 60 minutos.
Así que deberemos contar con algún sistema para insuflar aire al neumático tras la reparación, aunque incluso también podríamos necesitar introducir aire durante el proceso de reparación del pinchazo para trabajar de forma más cómoda y sin tener que ejercer tanta fuerza.
Entre los sistemas de inflado para la reparación de pinchazos destacan unas pequeñas cápsulas metálicas con un tamaño cilíndrico de unos 10 cm de largo por 2 o 3 cm de ancho que se pinchan a la válvula y que son capaces de meter en la rueda entre 0,5 y 1 Kg de aire.
La manipulación de estas cápsulas, que son de un único uso, debe realizarse con cuidado ya que en el momento de liberar el aire, prácticamente al instante la temperatura del metal de las mismas bajará considerablemente pudiendo quemar los dedos, por ello acuérdate de utilizar siempre guantes de protección, valen los mismos de pilotar la moto, para realizar las reparaciones.
Por otro lado los compresores eléctricos que se pueden conectar a la batería o a la toma de mechero de la moto u otro vehículo para inflar la ruedas.
El hándicap de estos compresores es su tamaño unido al poco espacio para carga que tenemos en las motos, así que llevarlo con nosotros mismos no siempre será un opción, a menos que se trata de un scooter o que tengamos sistemas de carga, como baúl y maletas, donde reservemos un espacio para el compresor, será un elemento de dudable practicidad más allá de usarlo en un parking o garaje privado.
Por último, y por supuesto tenemos los infladores de las gasolineras, los cuales suelen ser los más eficaces y precisos, pero que también pueden suponer un quebradero de cabeza al encontrarse a gran distancia de donde ha sucedido el pinchazo.
Piensa que recorrer distancias mayores al kilómetro con una presión muy inferior a la recomendada puede llegar a deformar la carcasa del mismo, por lo que si hemos perdido todo o casi todo el aire en la rueda no es recomendable.
En este último supuesto, el de los infladores de las gasolineras, la solución es combinada, llevar un par de cápsulas de aire comprimido, con las que podemos añadir un kilo de presión y así poder llegar rodando hasta la gasolinera sin fastidiar la carcasa.
¿Cuánto se tarda en reparar un pinchazo en una moto?
El tiempo que precisamos para reparar el pinchazo dependerá de varios aspectos, aunque sin lugar a dudas el más determinante será el relativo a nuestra pericia y experiencia previa en la reparación de neumáticos.
¿Dónde suceden más pinchazos?
En la rueda trasera, esto es porque al ser más ancha que la delantera tiene una mayor superficie de contacto con el asfalto, además el eje trasero es el que soporte una mayor carga, nuestro peso y el del acompañante, además de que el reparto de pesos de cualquier moto siempre recae en mayor medida sobre el eje posterior.
En cuanto a la ubicación, los pinchazos suelen suceder en carretera abierta y no en calles de una ciudad, aunque esto no es una afirmación que sea realmente cierta, tanto desde la lógica, como que en una ciudad se limpian calles a menudo y en las carreteras sólo cuando llueve, desde mi experiencia te puedo decir que la media manda y que la mayoría de pinchazos ocurren en vías interurbanas.
Y es que en más de 100.000 Km en moto habré experimentado no menos de 10 pinchazos que recuerde así a bote pronto, y de todos ellos en un ciudad he pinchado a lo sumo un par o tres de veces.
Las dos primeras veces que pinché la rueda de mi moto fue en alguna de los varios scooters que he llevado por la ciudad, y tras pinchar no he pensado jamás en repararme la moto por mi mismo, siempre he recurrido a un profesional, y es que en una ciudad es fácil.
Si la rueda aún conserva algo de aire, digamos que un kilo o un kilo medio de presión será bastante sencillo conducir hasta una tienda de reparación o cambio de neumáticos donde te pondrán una seta, mecha para reparar el pinchazo.
En algunas de estas tiendas intentarán que cambien la rueda, es su negocio, y para ello te argumentarán un par o tres de motivos.
No es por desconfiar de estos profesionales de los neumáticos, pero creo que deberías valorar seriamente la conveniencia o no de cambiar o reparar.
En el mundo actual donde todo nos aboca al reaprovechamiento, a la reparación, y lo hace por un motivo tan lícito como el bienestar del planeta, sería erróneo y un crimen ecológico que con un neumático todavía en buenas condiciones decidieses cambiarlo tras un pinchazo.
Las reparaciones de pinchazos son en casi su totalidad seguras, un pinchazo reparado debería proporcionarte las mismas garantías de seguridad que un neumático sin pinchazos.
Si bien esto puede depender más de que la reparación esté bien realizada o no más que de quién te la realice.